La Universidad analiza la danza española en Madrid. A lo largo de dos jornadas, la ciudad acoge el II Congreso Internacional de Investigación de la Danza Española.
“Buscamos la forma de incrementar la visibilidad de la danza española en la sociedad, que es muy escasa”, explica Juan Arturo Rubio, miembro del Comité Organizador del Congreso. “Para ello ponerla en valor, un paso fundamental es vincularla al saber, a la ciencia, para lo que es necesario potenciar las investigaciones y estudios sobre ella, pero de una forma que acaben sirviendo a los profesionales y alumnos” de este arte. Con ese fin profesores de distintas universidades nacionales, tanto públicas como privadas, y de conservatorios de danza presentarán ponencias que van desde la metodología para el estudio del flamenco hasta un análisis del repertorio del Ballet Nacional de España, sin dejar de lado la mirada concreta a los creadores, desde los históricos, como La Argentinita o Antonio Gades, hasta los presentes, casos del Cesc Gelabert de 'Belmonte' hasta Blanca Li.
El congreso también mirará la situación actual de la danza española en otros frentes como los de la difusión y la exhibición, donde presenta un estado de salud muy grave. “Queremos analizar, reflexionar y buscar las causas por las que la danza española sólo interesa a un número muy reducido de personas”, continúa el coordinador del grado de Artes Escénicas de la Universidad Nebrija y profesor de dicho centro. “Aunque no se han hecho estudios científicos y nos movemos, por tanto, en el terreno de las hipótesis, sí parece cierto que es una arte claramente minoritario, con un público escaso que, además, está fragmentado y es muy cambiante”.
Conocer a estos aficionados, el que podría ser el primer paso para revertir la situación, no es tan complicado. Bastaría son seguir los pasos de países como “Francia o los anglosajones, en los que las administraciones invierten en un arte que forma parte de su historia y ha conformado la identidad de sus pueblos, pero aquí es imposible porque el Ministerio de Cultura nunca ha querido estudiar la danza española ni ofrece oportunidades para hacerlo”, concluye Rubio que, junto a especialistas de otros centros de estudios nacionales va a analizar la salud del baile español.
CARLOS GALLEGO