Antonio Najarro, director del Ballet Nacional de España, ha presentado, en el la Casa del Léctor de los Teatros del Matadero de Madrid, el próximo estreno del BNE, en un coloquio cuya finalidad es el acercamiento al público.
Y previo a desentrañar los detalles que se expondrán próximamente a la prensa, cuyos secretos no vamos a desvelar, pudimos visionar algunos fragmentos de la nueva producción y conocer las motivaciones de sus creadores.
El programa se compondrá de dos partes, de la primera, "Alento" su coreógrafo y autor, Antonio Najarro nos cuenta que es un signo de su identidad y su maduración creativa, de su estilo, de ese "no se qué" que sintió desde niño y que podría calificar como su propio sello:
<<"Alento" es un vivo reflejo de mi estilo como creador, así como de mi visión personal de la danza clásica española. Un recuerdo de mi bagaje coreográfico, inspirado en la partitura del genial compositor, guitarrista y compañero de viaje Fernando Egozcue, el cual ha creado una música muy rítmica y llena de sensibilidad, que será interpretada por la ORCAM y por el propio Egozcue.>>
“Alento” será vestido por los exquisitos diseños de Teresa Helbig (ACME) , e iluminado por Nicolás Fischtel.
La segunda parte, "Zaguán", es un ballet flamenco compuesto por varias piezas pertenecientes a tres jóvenes artistas: Mercedes Ruiz, La Lupi y Marco Flores, junto a una artista de las que marcan época, Blanca del Rey.
La música de "Zaguán" ha sido compuesta por el guitarrista flamenco Jesús Torres y la diseñadora Yaiza Pinillos.
Marco Flores ha coreografiado una siguiriya para 18 bailarines, así como una güajira -combinada con ritmos de milonga-, que tiene la originalidad de ser bailada por hombres.
Se mostró agradecido, muy feliz y casi sobrecogido ante el reto que le ha supuesto afrontar una pieza para tantos bailarines, una gran oportunidad a la que accede siendo todavía muy joven.
La Lupi bromeó significando que para ella "coreografíar al BNE no puedo decir que fuera un sueño.. ¡Es que ni se me pasó por la mente!", exclamó con su gracejo malagueño, pero "todo vale la pena, todo vale la pena", reiteró.
Y con la expresividad de sus gestos contagió al auditorio con el entusiarmo que desprende quien ha alcanzado sus deseos permaneciendo fiel a sí misma.
Blanca del Rey, de quien Antonio Najarro subrayó que "su gran elegancia exterior está en completa sintonía con su interior".
Ella ha trasmitido a los jóvenes bailarines del BNE el gran legado de su emblemática "Soleá del mantón".
Sobre esta experiencia manifestó la gran artista: "he estado en el cielo, en el BNE hay muchísimo talento y una gran cabeza que lo dirige".
Para Blanca del Rey ha nacido otra soleá del mantón, y esto ha sido gracias al compositor Marcos Flores, que le dió una nueva inspiración con sus nuevos ritmos.
"La soleá del mantón, no es una técnica, es algo más, es un paso a dos. Me he emocionado tanto cuando he visto bailarla a Esther Jurado..." , dijo Blanca.
De repente, a Blanca del Rey se le quiebra la voz, sus palabras le salen de tan adentro que sus ojos se humedecen y su garganta se paraliza.
Y es que el alma no puede salir por la boca, el alma se le ve cuando baila.
El próximo día 12 en el Teatro de la Zarzuela se estrenará "Alento" y "Zaguán", una nueva obra, tejida con mucho esfuerzo y un montón de nuevas ilusiones, que conforman esa mezcla de técnica y entraña que nos ofrecen los artistas cuando lo entregan todo.
Mucha suerte.
MERCEDES ALBI
(Fotografías, María Alperi -2ª foto- y Albidanza)